Son muchos los que, bien debido a que quieren simplificar su vida, o que no pueden permitirse comprarse una casa, deciden vivir en una caravana para ahorrar y, al mismo tiempo, eliminar el exceso de equipaje, propiedades y preocupaciones.
La vida en una caravana, al principio, no es fácil, pero tiene múltiples ventajas sobre una casa fija.
Cómo vivir en una caravana
No te vamos a engañar. Vivir en una caravana es muy difícil. Pero se puede conseguir. Nosotros te damos algunas claves para hacerlo:
Realiza un inventario de todo lo que tienes y separa las cosas en dos montones: aquello que necesitas para vivir y lo que no. Una caravana tiene un espacio limitado y no puedes llevar todo tu equipaje. Siempre puedes pedirle a amigos o familiares que te guarden tus pertenencias o alquilar un guardamuebles para éstas.
Elige la mejor caravana para tu familia. Dependiendo de la que quieras, el precio puede subir más o menos. Tienes también que pensar en el mantenimiento de la misma, gasolina, etc. para presupuestarlo todo y ver si realmente te compensa o no vivir en una caravana. Si es así, adelante con ello.
Para tener electricidad, lo mejor es ponerle paneles solares y así hacer uso de la energía solar como fuente de energía renovable. Pueden ser algo caros pero a la larga se amortizan con el ahorro que tú tienes en electricidad.
Si quieres disfrutar de televisión, también tendrás que instalar un satélite para caravanas y un receptor. No es demasiado caro.
Elige el lugar donde te vas a quedar. Vivir en una caravana no quiere decir que tengas que ir de un lado a otro, menos si tienes un trabajo con el que has de cumplir. Pero sí es recomendable que decidas dónde vas a instalarte, ya sea campamento, parques para caravanas o incluso un solar que alquiles por un tiempo.