SOLUCIÓN A LAS PLAGAS CON AHUYENTADOR ELECTRÓNICO

Los son la última moda utilizada para ahuyentar todo tipo de pequeños animales e insectos, ya que, al contrario que otros métodos, éste no busca el exterminio o daño hacia ningún ser vivo, sino que simplemente evita que visiten lugares no deseados. Así, se evita el contacto con los seres humanos, especialmente sensibles como niños y ancianos, y también que ataquen otros lugares susceptibles de pérdidas económicas, como jardines, huertos o invernaderos.

A pesar de que los han existido desde hace muchos años en forma de spray, lociones y cremas, lo cierto es que estos métodos han dado paso a otros mucho menos dañinos tanto para el hombre como para el medio ambiente; este es el caso de los electrónicos para insectos y roedores. Actualmente existen multitud de aparatos diferentes de este tipo, dependiendo sobre todo del tamaño de la zona y del tipo de animal que se pretenda repeler. Así, en el mercado podemos encontrarnos , ratones, topos, pájaros o murciélagos; emiten un ultrasonido imperceptible para el ser humano, pero que resulta insoportable para el animal, por lo que no se acercará a la zona protegida.

Los animales normalmente reaccionan de forma desorientada y atontada, para a continuación huir de la zona de peligro, ya que el ultrasonido es totalmente intolerable para ellos. El aturdimiento debido al sonido ensordecedor no sólo afecta a su aparato auditivo o a su sistema nervioso, sino que también muchas veces su sistema locomotor se atrofia y se muestran torpes en su huida.

Aunque la mayoría de estos aparatos están diseñados para interiores, hay algunos especialmente ideados para espacios al aire libre. Están construidos en materiales resistentes y de gran calidad para resistir las inclemencias del tiempo, tanto la humedad como las altas temperaturas. Además, están certificados para no interferir en ningún otro aparato eléctrico o magnético que se encuentre alrededor, tales como marcapasos, alarmas, detectores de humo, electrodomésticos, etc. Eso sí, los fabricantes recomiendan que para acabar debidamente con la plaga que nos afecta debemos usar de forma continuada el ahuyentador, ya que de otra forma su eficacia se vería mermada. Muchos consumidores los desconectan al notar que van apareciendo más de estos animales que queremos erradicar, pero esto sólo ocurre porque se encontraban escondidos y salen por el efecto perturbador del ultrasonido. Aunque pueda resultar desagradable, no hay que dejarse llevar por este hecho, sino continuar con el aparato en funcionamiento hasta que todos los animales huyan y la plaga no se atreva a acercarse de nuevo.

El número de aparatos ahuyentadores a utilizar depende del tamaño del espacio donde se coloque, el tipo de ambiente y la cantidad de objetos que obstaculicen la onda expansiva del sonido, la magnitud de la plaga… Pero siempre resulta un método bastante económico en relación a otros, ya que su período de vida suele ser muy larga. Aunque como se ha dicho es un método limpio y eficaz, muchos encuentran cierta desventaja, ya que una vez que los animales huidos no encuentren comida, volverán al área afectada hasta que se acostumbren al sonido, y se adaptarán a las altas frecuencias, por lo que seguirán merodeando el lugar.